Recordando al poeta de la Llanura......

Se crea este Blog, con el trabajo conjunto de los hijos y familiares del Poeta de Camaguán, quien dedicó su vida, aún fuera de su terruño, al estudio e investigación de su historia, tierra y costumbres, en una constante lucha para mantener vivas sus raíces y tradiciones. Germán Fleitas Beroes, plasmó en sus libros y escritos, su voluntad y esperanza de que su obra no quedara en el olvido, pues había mucho de Venezuela en ella. Amó su país y amó el rincón de suelo en el que nació y se esforzó en sembrar la identidad nacional a través de su pluma. Por eso, hoy sus hijos y familiares, juntamos nuestros recuerdos para crear esta página en honor a un venezolano auténtico.

Damos disculpas a nuestros lectores pues nuevamente está presentando fallas el reproductor LISTENGO, lo cual impide escuchar los audios subidos en dicho programa. Trataremos de solventar a la brevedad dicho inconveniente.

viernes, 24 de junio de 2016

GUAYABO APUREÑO



GUAYABO APUREÑO



-Por allá viene a caballo
Un hombre en la lejanía,
El pajonal se le enreda
Como una cinta amarilla:
Entre la tierra y el cielo
Un punto rojo lo aviva;
Hacia el hato va rumbeando;
Ya conocí la cobija
Aquel es mi compañero
Que anda regando noticias.
¡Me voy a la “puerta e´ tranca”
A darle la bienvenida”

-Nada me dice el catire.
¡Salud, catire!, le digo;
¿Por qué vienes tan callado
Con esa cara tan triste?

_¡Compañero: vengo triste
Por culpa de una mujer;
En estos llanos de Apure
También se aprende a querer,
Y el cariño echa raíces
Sin uno mismo saber!....
Me siento como la abeja
Cuando le roban la miel,
Como el caballo que quiere,
Pero no puede correr
Como el que siembra un rosal
Y no lo ve florecer,
Como el que cruza esta tierra
Solamente por placer,
Y no encuentra una palma
Ni un pozo donde beber.

 ***

jueves, 23 de junio de 2016

Parranda

PARRANDA

Las rosas de un galerón
Florecen en la cantina
Pulsa su luz mortecina
El candil en el horcón
Un indio guachamarón
Se para y saca pareja,
Sacude el polvo y se aleja;
El arpista bordonea
Y la zamba se menea
Del talón a la crineja.
¡Arpa que me rinde el sueño!
Grita un borracho fiestero;
Alegre como un jilguero
Canta un catire apureño;
Se arrima un calaboceño
Al banco del mujerío;
Corta nubes el tañío
Suena linda la alpargata
Y a distancia se retrata
La media luna en el río

Las muchachas , codo a codo
Bailan un “Seis Numerado”
Y es mucho el enamorado
Que va buscando acomodo…
El arpista en un recodo
Del arpa, borda el tipleo;
Van marcando el cintureo
Los hombres en buena ley,
Y a cien varas del caney
Se escucha el alpargateo.
¡Maraca que voy pelado!
Grita con gesto altanero
Un zambo faramallero
De chaparro encabuyado;
Se viene de medio lado
Hasta el quicio de la puerta;
Se deja la blusa abierta,
Se aprieta los pantalones
Y sacude los talones
Cuando escucha la revuelta.

La negra que lo acompaña
-negra de soga y cuchillo-
Sobre el pecho de un ladrillo
Con la pata lo “regaña…”
La mano busca la entraña
De la prima y del bordón;
Bajo la luz del horcón
La negra se le chacea
Y el hombre se bambolea
Como espiga en ventarrón

Leyendas: El Espanto de La Rubiera


EL ESPANTO DE LA RUBIERA
1
La brisa llanera, 
la brisa de siempre,
conoce la historia 
de cada sabana,
conoce la historia
de cada palmera,
conoce la historia 
del hato y del caño.

2
Me dice al oído 
que en aquel lindero
hace muchos años,
hace siglo y medio,
enterraron vivos
a un hombre, a un caballo,
a un perro y un toro, 
por orden del dueño.

3
Y ella misma cuenta 
que aquí en esta tierra,
aunque no haya cintas
de alambre clavadas
ni esten los vaqueros 
vigilando puertas,
no salen los toros
que “pitan” adentro
Ni enlazan las sogas
que vibran afuera.

4
¡Misterio! ¡Misterio! 
-las cosas del llano-
El potro retinto 
que esconde al hatajo,
el toro de fuego 
que cuida el rebaño,
el perro de azufre 
que ahuyenta a los hombres,
el alma del negro
que vive rondando……..
German Fleitas Beroes 1.955.

Galerones y Contrapunteos

GALERONES Y CONTRAPUNTEOS

¡Aaaayyyy….!
Desde el llano adentro vengo
Sobre un caballo trotón,
Afinando la guitarra
Por la prima y el bordón,
Para ensayar las estrofas
De este alegre Galerón,
Que le mandan los llaneros
En franca demostración
De cariño y de respeto,
De afecto y admiiración
Al gran pueblo de Valencia
-orgullo de mi nación-
en los cuatrocientos años
justos de su fundación

¡Aaaaaayyy!
En los cuatrocientos años
justos de su fundación;
¡Viva Dios en las alturas,
Viva Cristóbal Colón,
que viva la Independencia
viva la Federación,
viva Bolívar y Plaza
viva Cedeño y Salom,
viva José Antonio Páez
viva camejo y Rondón,
vivan los hombres del pueblo
-grandotes de corazón-
que cayeron por la Patria
dándole fuego al cañón!

Aaayyyyyyyy!
Que cayeron por la Patria
dándole fuego al cañón;
así como cae la espiga
cuando pasa el ventarrón,
como cae el toro bravo
cuando le dan el templón,
¡Señores, pongan cuidado!
entiendan el Galerón:
la espiga y el toro bravo
vuelven a su posición
despues que pasa el caballo
y se aplaca el ventarrón

¡Aaaayyyy!
Despues que pasa el caballo
y se aplaca el ventarrón:
igual cosa sucedió 
en esta noble Nación
con los hombres que cayeron
dándole fuego al cañón,
y que hoy la América toda
-con orgullo y devoción-
los lleva firmes adentro...
¡Muy hondo en el corazón!

Llaneradas

Llaneradas


 ¡Su palabra vaya "alante"!
perdóneme que le explique:


Con pastillas de "¡Ah Malaya!"
con oraciones de ensalmos
y con zumo de "¡quien quita!"
cura el llanero sus males.


El que quiera sentirse hombre
que venga al llano compadre,
para que pruebe si tiene
condiciones en el alma;
porque aquí los hombres sufren
pero no dicen palabras,
por lo mismo que son hombres
y tienen el alma grande


Venga a probar su malicia
caminando sin baquiano
al rumbo de cielo y tierra
que es como se anda en el llano.

Echele la pierna a un potro,
bájesele a un toro bravo
y no pierda la fe en Dios
cuando le toque, compadre,
cruzar a nado en lo oscuro
caño donde haya caimanes.


AUDIO LLANERADAS 

(CON EL BOTON DERECHO, MARCAR "ABRIR ENLACE EN PESTAÑA NUEVA”)


Y lleve su bastimento
cuando salga de camino,
y no le tema al caimán,
que para caimán, cuchillo,
ni a toro en sabana abierta
que para eso es la cobija,
ni a caballo corredor
mientras haya lejanía,
ni a bongo de cuatro bocas
si tiene buena espadilla,
ni a mujer que lo desprecie
ni a cantador que lo intrigue,
ni a mogote que lo envuelva
ni a guapo que se le arrime,
ni a rumor que lo trasnoche
ni a silencio que lo crispe
ni a pena que lo devore
ni a enfermedad que lo mine,
porque aquí todo se cura
con ¡Ah Malaya! y ¡quien quita!

El que quiera sentirse hombre
que venga al llano, compadre,
para que pruebe si tiene
condiciones en el alma;
porque aquí los hombres sufren
pero no dicen palabras,
por lo mismo que son hombres
y tienen el alma grande.

¡Perdóneme que lo alerte:
¡su palabra vaya "alante"!

Coplas al "Pié del Arpa"

TOLVANERAS.
AL PIE DEL ARPA.

1

Dale comida a tu perro
Si no lo quieres perde’
Si tu mujer es honrada
No dejes otro le de….

2

Me pediste cuatro reales
Te los tuve que nega’,.
¿Cómo sabes si es mezquino
El que no tiene que da’?

3

Aunque tú me hagas la guerra
Estos reales me los llevo,
¡quien ha visto en esta tierra
Zamuro cuidando sebo!

4

Lo que yo perdí jugando
Lo perdí de de buena gana
¡mas vale una cuarta ‘e mesa
Que cien leguas de sabana!

5

El que sueña que es difunto
Aunque sea fiebre le da’,
¡no pienses nunca en la muerte
Que esa tiene que llega’!

6

Juan Sonso me anda buscando
De pelo ’e guama y cotiza,
¡yo con el no voy ni a misa
Porque llega saludando!
7

El amor y el interés
No pueden disimularse,
Yo conozco al que renquea
En el modo de pararse!

8

El que quiera conocerme
Tiene que venderme fiao,
¡Señores , no pierdan tiempo
Vendiéndome de contao!´

9

Si ayer te tiro la puerta
Páratele en la ventana,
que el hombre es igual al gallo,
Si no repite no gana….

10

La copa del “ josefino”
Parece una llamarada,
Parece una puñalada
que le dieron al camino.

11

Quien aguanta los lamentos,
de este bambú tan llorón
¡no llores mi corazón,
Que esas son cosas del viento!

12

No te aflijas corocora
Que yo volveré muy pronto,
Lorito real, no seas tonto
¡que el hombre macho no llora!.


Leyendas: La Bola de Fuego


LA BOLA DE FUEGO

Allá viene un pelo e´guama
por sobre aquel pajonal,
son de plata las charnelas,
escúchales el cantar

¿Visita en dia de los Muertos?
¡hum! debe ser un conocido....
¡mira el caballo alazán
 como rompe las espigas!

***
    -¡Salud!

-¡Salud!, bájese y pase adelante
-¡No es preciso, compañero!
-¿De dónde viene por ái?
-¡De las puertas del infierno!

***

Se balanceó en la silla el  forastero,
silbaron las espuelas en el viento,
de sus ojos brotaron las candelas
que le quemaron las barbas al abuelo;
el freno, las polainas, los estribos,
el caballo y el hombre se volvieron
una bola de fuego.....
¡Virgen del Carmen!- exclamó el viejo-,
¡El Alma del Tirano Aguirre,
y no haberle echado un "ajo" a tiempo!

Tolvaneras

-¡Señores:
Si resuelven ir al llano
les voy a dar una idea:
¡Ni a bongo se deja suelto,
ni a potro se mañosea,
ni a mujer se le da cuerda,
ni a mogote se menea,
ni a toro bravo se grita,
ni a tigre se corotea!.....

Este libro de versos criollos, silvestre como las flores de la sabana, tiene por objeto rendirle homenaje al llanero, al hombre de "caballo y soga", a ese que se siente conforme en su vida con una mujer, un potro y una guitarra.

"Tolvaneras" nació junto con un pasaje de Juan Vicente Torrealba: (el tocaba y yo escribía): carece de técnica poética y no es otra cosa que la expresión de un hombre de la sabana, que se trajo para Caracas los recuerdos de su tierra.

Para Juan Vicente, para Carlos Cruz Diez y para mi hermano el Dr. Pedro Fleitas Beroes, mis palabras de agradecimiento por la colaboración que me prestaron para publicar este libro.

                                                                                                                       El Autor
Mis coplas, pasajes y otros versos, así identifica el poeta este libro en su primera página. Publicado en 1955, es una recopilación de poemas, coplas y canciones. Poemas muy autóctonos y descriptivos de la vida del llanero, poemas que hablan de las faenas, diversiones,el sufridor del llanero y también de las creencias y leyendas. Incluye varios de los temas de las canciones que se convirtieron en pasajes exitosos. Dedicado como todas sus obras a sus hijos, esposa y familia en general; a pesar de su modesta opinión sobre que el contenido de la obra carece de técnica poética, nosotros, su familia, consideramos que es una obra de gran valor literario pues plasma de manera sencilla y sin descuidar las reglas de la versificación, la vida  simple del llanero en la forma que él la vivió y conoció.

jueves, 2 de junio de 2016

LA MOZA DE RONDONERO

LA MOZA DE “RONDONERO”

-Hágame el favor, amigo,
Páseme acá la guitarra
Que voy para “Rondonero”
A dar una serenata.

Arriba la luna llena
Y el lucerito en el anca,
Un corro de cien gallinas
Hiela el bordón de mi sangre,
Camino, piso mi sombra,
Oigo el cacareo del gallo
En su torre de hojas verdes,
Arriba en el campanario.

A golpe de diez y media,
Mas o menos voy llegando
A la casa limpiecita
Donde vive una zagala
Que vi por primera vez
En unos toros coleados
Y que parece una rosa,
Una rosa de montaña.

Le doy suave a los bordones
Enfrente de su ventana
Y voy subiendo de tono
Para echar algunas bambas,
Punteo el “Zumba que Zumba”
Toco después “La Guayaba”
Y remato la ofensiva
Con una “Quirpa” tramada.

En eso escucho la voz
Relancina y bien amarga
De un hombre semidesnudo,
Recostado de las trancas:
Las gracias le voy a dar
En nombre de mi muchacha,
Ella se fue para el fundo
Ayer en la madrugada!

Me quede como una momia,
De esas momias milenarias
Que contemplan los turistas
Cuando visitan El Cairo,
Pero el hombre comprensivo
Como yo no contestaba
Me tendió una mano franca,
Dura como una mandarria.

Después me dio la lección
mas dura que me hayan dado:
¡Oiga joven! esa moza
No es carne para su gancho;
Cuando estaba pequeñita
Quedó huérfana de madre
No tuvo más compañera
que una muñeca de trapos
y de libros no conoce
ni las letras del primario;
ella misma es la que ordeña
la que quiebra la cuajada,
cuando hay un potro cerrero
le echa la silla y lo amansa
y se coge verso a verso
con los hombres en el arpa.

No piense que es una ofensa
El que le haga esta relafica,
Es que quiero que comprenda
Lo que pensamos los Taitas
Con relación a los hombres
Que usan camisa y corbata
Cuando piensan hacer nidos
Con mozas de la sabana.

Ante aquella explicación
Le di tímido las gracias,
El se quedó pensativo,
Tremolando la mascada
Y me dijo con aliento
De puro tabaco en rama,
¡Váyase por travesía
que la luna esta bien clara!

Después supe que era un hombre
Nativo de Chaguaramas,
De la estatura y el peso
Que impongan las circunstancias;
Buen jinete, buena soga,
Buen amigo y buena lanza,
Descendiente de RONDON,
El de la intrépida carga,
El RONDON de CARABOBO
Y del PANTANO DE VARGAS.

miércoles, 1 de junio de 2016

Boves y sus Hombres


Continuamos contando nuestra historia con los versos del Poeta Fleitas Beroes. En esta oportunidad, el corrío trata de José Tomás Boves. Igual que en los anteriores poemas, el poeta demuestra conocimiento y pasión en los hechos que protagonizaron nuestra independencia. Boves no queda atrás, él fue sin duda un gran caudillo con carisma y capacidad estratégica comparada sólo con el General Páez. Caudillos con algunas características comunes y grandes antagonismos: catires, llanerazos de colcha y cobija (recordemos al poeta  Luis Alberto Crespo: "no se nace en la llanura. Uno nace llanura, viene de ella o va hacia ella"),  recios, fieles con su tropa, con capacidades insólitas de reclutamiento y formación de grandes ejércitos en poco tiempo, capacidad para arrastrar masas,  para grandes estrategias, decididos, valientes, seguros…. Se podrían mencionar muchas otras similitudes, pero también tenían grandes antagonismos, siendo el más resaltante la crueldad del primero contra la nobleza del segundo, crueldad nacida del resentimiento y la sed de venganza en uno y nobleza nacida de un corazón sencillo con capacidad de perdón y sentimientos paternales de protección en el otro. Uno el terror de una época, el otro, un orgullo para los venezolanos. Ambos “Taitas”, ambos conductores de llaneros….

Boves y sus Hombres
Corrido.


Había nacido en Asturias
Aquel joven chapetón
Catire de ojos azules
Marino de profesión
Boves era su apellido,
Su carácter bravucón
Aprendió marinería
Con Don Diego del Cayón
Considerado en España
Eminente profesor
Lo examinaron después
En el puerto del Ferrol
Y se graduó de piloto
Debido a su aplicación

¿A que vino a Venezuela?
Nadie sabe dar razón;
Estando en Puerto Cabello
-refiere la tradición-
Introdujo un contrabando
Pero de poco valor;
Sin embargo ya tenía,
La boleta de expulsión
Para mandarlo a su tierra
A pagar larga prisión;
Pero cambiaron la pena
por una pena menor
y lo enviaron para el llano
sin mayor explicación.

Fue a parar a Calabozo
Con la recomendación
De tener bonita letra
Y ser un hombre de acción:
Lo enseñaron a llanero
Los mozos de la región:
Aprendió a tumbar un toro
A jinetear un potrón
A cruzar a nado un rio
A enlazar un cimarrón
A bailar un golpe de arpa
Dándole duro al talón
A sacudir las maracas
A tocar un guitarrón
A rabiatar una soga
A pegar un pescozón
Y a robarse una muchacha
Sin mucha contemplación.

Luego se metió a pulpero
Y gano real a montón,
Dicen que el padre Llamozas
Fue siempre su protector;
hacía viajes para Oriente
montado en su carretón
víveres y mercancías
los compraba al por mayor;
media docena de mulas
cargaba en cada ocasión
y después en el negocio
empezaba la función:
-¡Cambio una vaca parida
Por este sombrero alón,
Y un par de espuelas de plata
Por un burro mamantón!.

Sus vicios y sus virtudes
Causaban admiración:
Como enemigo era malo
Hasta la exageración,
Pero pagaba con creces
Cualquier tipo de favor;
Al negocio concurrían
El llanero socarrón
El bandido y el honrado
El decente y el ladrón
Entre aquella perolera
Nunca le faltaba el ron
Y para el padre Llamozas
Vino de consagración.





Hizo dinero el catire,
Tuvo una rica mansión
Le gustaban las muchachas
Como al pájaro la flor,
Pero los tiempos cambiaron
Sonó la revolución;
Caracas, la gran Caracas
No quiso más opresión,
Entonces el taita Boves
Estudió la situación
Alardeaba de patriota
En toda conversación;
A la hora de hacer lanzas
Daba su contribución
Pero en el alma tenia
Siempre la doble intención
De ser patriota fingido
Y realista de corazón
Luego se marchó a San Carlos
Con escasa provisión
Fue solo por conocer
La verdad de la cuestión
Al regreso trajo “bolas”
De las de marca mayor:
”que el terrible Monteverde
Comenzaba la invasión,
Que BOLÏVAR y sus hombres
Aceptaron rendición
Y que el gobierno tenia
todo bajo su control”

Por orden del juez Briceño
Lo metieron en prisión
Lo sentenciaron a muerte
Sin gracia de apelación;
Pero fue el propio Antoñanzas
Su tabla de salvación
Este lo sacó del cepo
Y le concedió el perdón
Entonces vino la purga,
La muerte sin distinción,
La puñalada trapera,
El machetazo a traición.

Como el hombre era valiente
Produjo tal sensación
Que enseguida se le unieron
Los indios de “La Misión”;
Por otra parte llegaban
Negros, pero por montón,
No querían ser mas esclavos
Y en eso tenían razón.

El llano estaba revuelto;
De Calabozo al Rincón,
Del Sombrero a San Fernando,
De Camaguán a la Unión.
Del Rastro a Guardatinajas,
Del Corozo a Remansón,
De Guayabal a San Jaime,
Del Calvario a la Estación,
Marchaban hombres con lanzas
Y todo era confusión;
La consigna:¡Viva El Taita,
La Corona y el León!
Lo demás, todos lo saben,
Boves fue un hombre feroz
Con un ejército criollo
Que siempre lo respaldó.
Aquí cabe recordarles
La terrible emigración
A Oriente, y a la cabeza
BOLIVAR, LIBERTADOR.

El ejército de Boves
Permítanme la expresión;
Era un barco del infierno
Con un loco en el timón;
Pero a cada quien le llega
Su momento de expiación
Y a Boves le llego el suyo
En Urica , en plena acción;
Cuentan que Pedro Zaraza
Lo derribó del Potron
Y entonces llegó Bramante
Y le partió el corazón.
La noticia de su muerte
Fue como una bendición,
El ejército quedó
Como cuatro sin bordón
Como tinaja sin agua
Como bongo sin patrón;
ni Morales ni Ceballos
gozaban de admiración
y poco a poco los hombres
volvieron a su región…